¿Cómo calcular los intereses de una hipoteca?
La hipoteca es uno de los productos financieros más comercializados, pues la mayoría de las personas que piensan adquirir una vivienda recurren a una hipoteca para financiar la compra de su nueva casa. La contraprestación de solicitar un préstamo hipotecario al banco supone afrontar unos intereses que variarán en función del tipo de hipoteca que se contrate: fija, variable o mixta. Para calcular los intereses de una hipoteca intervienen diferentes factores que te contamos a continuación.
Calcular los intereses de una hipoteca fija
En las hipotecas a tipo fijo, como su propio nombre indica, se cobra el mismo tipo de interés durante toda la vida del préstamo. Es decir, el cliente sabrá desde el momento en que firma el contrato de la hipoteca, cual será la cuota mensual que deberá pagar hasta que finalice la deuda.
Por ejemplo, si tienes una hipoteca fija al 2% de 200.000€ a 25 años, la cuota mensual será de 1.011,77€ al mes. La cuota permanece fija, pero los intereses serán más elevados al principio de la hipoteca y luego disminuirán hasta completar la devolución del préstamo. A partir de este cálculo podemos conocer lo que pagarás en intereses por tu hipoteca:
- Primera cuota: 200.000€ x 2% dividido entre 12 meses = 333,33€ de interés en la primera cuota
A continuación, calculamos las siguientes cuotas restando la cuota mensual (1.011,77€) al capital que nos queda por devolver. Y, con este dato, aplicamos la fórmula anterior para conocer lo que pagarás de intereses en cada próxima cuota:
- Segunda cuota: 200.000€ – 1.011,77€ = 198.988,23€
198.988,23€ x 2% dividido entre 12 meses = 331,65€ de interés en la segunda cuota - Tercera cuota: 197.976,46€ x 2% entre 12 meses =329,96€ de interés en la tercera cuota
Aplica esta misma fórmula hasta completar las 300 cuotas mensuales.
Calcular los intereses de una hipoteca variable
A diferencia de las hipotecas a tipo fijo, en el caso de las hipotecas variables el interés fluctuará con el paso del tiempo y la entrada de otros factores como el Euríbor.
Generalmente, las hipotecas variables cobran un interés fijo durante un tiempo determinado en los primeros 12 o 24 meses del préstamo y, posteriormente, la cuota pasa a ser variable.
Para calcular los intereses variables, hay que sumar el diferencial que establece el banco al valor del Euríbor. Las hipotecas variables revisan el interés cada seis o doce meses, por lo que los titulares del préstamo deben estar atentos ante las posibles fluctuaciones de este indicador.
La forma de calcular los intereses de una hipoteca variables es la misma que el procedimiento de las hipotecas fijas, modificando la tasa de interés según el Euríbor. Por ello, es importante valorar bien las condiciones de cada hipoteca e informarse sobre la situación económica del país y del euro y cuál es la previsión para los próximos años. Además, puedes utilizar un Comparabanco para estimar cuáles serán los requisitos de los préstamos que más se acerquen a lo que estás buscando.
Factores importantes para contratar una hipoteca
Además del tipo de interés aplicado en la hipoteca por cada banco, es importante fijarse en otros factores importantes antes de solicitar un préstamo.
Fíjate en la TAE
La Tasa Anual Equivalente o TAE incluye las comisiones, vinculaciones y otros gastos derivados de la contratación de una hipoteca. El TIN o Tipo de Interés Nominal refleja los intereses que cobra el banco por prestar una cantidad determinada.
Impuestos derivados de la hipoteca
Contratar un producto financiero como una hipoteca supone asumir otros gastos como son los impuestos. El IVA es un porcentaje importante para tener en cuenta, ya que incrementa considerablemente la deuda de la hipoteca. Otros gastos como gestoría, tasación, notaría o Registro de la propiedad también es importante que los valoremos antes de contratar una hipoteca u otra.
Ahorros personales
Por último, antes de elegir una hipoteca tienes que saber cuáles son tus ahorros personales con los que harás frente al pago de la parte que no financia la hipoteca. Por norma general, los bancos no están dispuestos a cubrir más del 80% del valor de la vivienda, por lo que deberás disponer de, al menos, ese 20% restante en ahorros personales y un 10% para posibles gastos imprevistos.
Consulta aquí cuáles son las mejores hipotecas y qué bancos las ofrecen.